Juan Carlos Cuéllar, director de R-III rizoma shakespereano
Por Sebastián Liera:
Por Sebastián Liera:
"En esa breve entrevista, Juan Carlos Cuéllar, director de "R-III
Rizoma Shakespeareano" y uno de los artífices
de Artemisa Teatro, va
respondiendo una a una las preguntas de Agustín Villalpando (Enkidu
Magazine) como supongo lo haría un creador: guarda silencio para
escuchar, guarda silencio para pensar, y,
en medio de esos silencios, cuando va lentamente urdiendo sus ideas,
reviste a la palabra de silencios nuevos porque reconoce que no tiene
todas las respuestas: duda y, en su duda, se muestra humilde y
cuidadoso, acaso cariñoso: guarda, no de su honra ni de una fama que lo
más seguro es que le vale madres, de su trabajo creativo. En su mirada,
uno puede seguir (sin comprender, pero seguir) el imbricado tejido del
rizoma de sus propios pensamientos: sus ojos dibujan en el aire un
racimo de miradas. Vale, pues, no la pena, el viaje, atravesar la
ciudad, emprender la aventura del sopor citadino y llegar al CEUVOZ
donde se están presentando estas mujeres y estos hombres de teatro. En
su humildad para emprender el trabajo creativo, en su dedicación, en su
compromiso para enfrentarse a sí mismos y en su bendita duda motora,
está la garantía de que el "espectador" quizás deje de serlo para
convertirse en actuante de una experiencia que le tocará de tal modo que
al levantarse de su asiento, aunque parezca una frase trillada, no
saldrá siendo el mismo que era en un inicio; y sólo le "costará"
cooperar de manera voluntaria y, sobre todo, consciente. La pesadilla de
Ricardo, nos dicen Juan Carlos y sus generosos cómplices, es la de
todos, y sirve de caldo de cultivo al rencor lentamente macerado por la
exclusión de la burla y el desprecio, ingredientes más que suficientes
para crear el mal que Ricardo representa y del que todos somos madres y
padres."
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